La amistad es una parte importante de nuestras vidas. Nos proporciona compañía, apoyo y diversión. Pero mantener una amistad a largo plazo, a veces nos puede resultar difícil, especialmente cuando la vida nos presenta desafíos que ponen a prueba nuestra relación.

Hoy te contamos la historia de Ana y Sofía. Se conocieron en la universidad y rápidamente se hicieron muy amigas. Pasaron muchas horas juntas, riendo, estudiando y compartiendo sus sueños y metas para el futuro. Después de graduarse, Ana consiguió un trabajo en una ciudad diferente, lo que hizo que fuera más difícil para ella y Sofía mantenerse en contacto. Sin embargo, a pesar de la distancia, Ana y Sofía siguieron hablando regularmente por teléfono y programando visitas cuando podían. Con el tiempo, la vida cambió para ambas. Ana se casó y tuvo hijos, mientras que Sofía se enfocó en su carrera. Pero a pesar de estos cambios, Ana y Sofía siguieron siendo amigas cercanas. Se apoyaron mutuamente a través de momentos difíciles y celebraron juntas los logros y las victorias.

Claves para mantener una amistad duradera

Vista esta historia, ¿cuáles son las claves para mantener una amistad duradera? Cada amistad es diferente y las personas que la componen también lo son porque, probablemente, han vivido experiencias personales distintas a las tuyas. Aún así hay unos aspectos básicos para cualquier amistad duradera:

  1. Comunicación honesta

La comunicación es esencial en cualquier relación, pero es especialmente importante en la amistad. Cuando hablamos de comunicación, nos referimos a hablar y escuchar, pero también a estar conscientes de la comunicación no verbal. Es importante que seas una persona honesta y abierta con tus amigos y amigas y que les escuches atentamente. De esta manera, podréis evitar malentendidos y conflictos. Además, hacerles saber que te importa lo que piensan y sienten les hará sentir valorados y cómodos compartiendo sus pensamientos y sentimientos contigo.

Recuerda que la comunicación no se trata solo de palabras, sino también de lenguaje corporal, tono de voz y expresión facial. Por ello, es importante que seas consciente de tu propio lenguaje corporal y de cómo se percibe por otros, así como prestar atención a la comunicación no verbal de tus amigos. De esta manera, podréis superar juntos los desafíos que surjan en vuestra amistad y disfrutar de una relación saludable y duradera.

  1. Compartir intereses y pasatiempos

Compartir intereses y pasatiempos con tus amigos es una forma maravillosa de fortalecer vuestros lazos de amistad. ¿Qué mejor manera de pasar tiempo con alguien a quien queires que haciendo algo que ambos disfrutáis? Así que, si queréis pasar un buen rato juntos, ¡organizad una actividad que os guste a ambos! Podéis ir al cine a ver la última película que os interese, hacer deporte juntos o incluso cocinar juntos vuestras comidas favoritas.

Esto no solo os dará una excusa para pasar tiempo en compañía, sino que también os permitirá descubrir nuevos intereses y pasatiempos que podríais compartir. Además, cuando hacéis cosas juntos, creáis recuerdos y experiencias compartidas que pueden ayudar a fortalecer vuestra amistad a largo plazo. Así que no dudes en proponer actividades que os gusten a ambos y compartir momentos divertidos y emocionantes juntos. Verás que no solo pasaréis un buen rato, sino que también reforzaréis vuestra amistad.

Mantener una amistad a largo plazo
  1. Brindar apoyo emocional

La vida puede ser complicada y a veces puede ser difícil lidiar con todo lo que nos presenta. En momentos como estos, es cuando es más importante tener amigos a nuestro lado. Cuando tus amigos estén pasando por un momento difícil, es importante que le brindes apoyo emocional para mantener la amistad a largo plazo.

Primero y ante todo, escucha. A veces, lo mejor que puedes hacer es simplemente estar allí para ellos y escuchar lo que tienen que decir. Asegúrate de que sepan que estás allí para ellos, que te importa lo que les está pasando y que están en un espacio seguro para compartir sus pensamientos y sentimientos. Si te piden consejo, ofréceles tus mejores consejos, pero sin imponer tus ideas o presionarlos a tomar una decisión. A veces, solo necesitan alguien que les escuche y les brinde apoyo. Pero si les das consejos, asegúrate de que sea desde el corazón y con la intención de ayudarlos. Al fin y al cabo, la amistad se trata de estar allí el uno para el otro, en los buenos y los malos momentos.

  1. Respetar los límites de tu amigo

Todos somos diferentes y tenemos distintas formas de pensar, actuar y sentir. Por ello, es esencial que respetes los límites de la otra persona y no la presiones para hacer algo que no quiere. Siempre asegúrate de comunicarte con ella y preguntarle qué le hace sentir cómodos y cuáles son sus límites. De esta manera, podrás entender mejor lo que tu amigo está dispuesto a hacer y lo que no. Si algo no le parece bien, no la presiones ni la obligues a hacerlo. Respeta sus deseos y necesidades.

Recuerda que no todos somos iguales y que cada uno tiene su forma de ver el mundo. Por lo tanto, no te enfoques en tus propios deseos y necesidades, sino en los de tu amigo. Para mantener la amistad a largo plazo, siempre debes preguntar antes de hacer algo y asegurarte de que los dos estáis cómodos con la situación para mantener la amistad a largo plazo.

  1. Aceptar y perdonar

En cualquier relación humana, es normal cometer errores y a veces, podemos hacer daño a nuestros amigos sin querer. Lo importante es que sepamos aceptar que nadie es perfecto y estemos dispuestos a perdonar a nuestros amigos cuando cometen errores.

Si tu amigo comete un error o hace algo que te lastima, lo mejor es hablarlo. Explícale cómo te hicieron sentir sus acciones y escucha su punto de vista también. En muchas ocasiones, una conversación sincera resuelve muchos los malentendidos. Por otro lado, si eres tú quien cometió el error, lo mejor es pedir disculpas y tratar de reparar el daño. Es importante que reconozcas tu error y que te disculpes sinceramente con tu amigo. Si es necesario, haz lo posible por compensar el daño causado. No olvides que la amistad es una relación bidireccional y que las dos partes debemos estar dispuestas a perdonar y ser perdonadas.

  1. Superar los desafíos

Aunque deseamos que la amistad sea siempre fácil, a veces surgen desafíos que pueden poner a prueba nuestras relaciones. La distancia geográfica, las diferencias de opinión y los cambios en la vida son solo algunos de los desafíos que pueden surgir:

  • Distancia geográfica: Si vivís en diferentes ciudades o países, puede ser difícil mantener la amistad. Sin embargo, hay muchas maneras de manteneros conectados, como a través de videollamadas, mensajes de texto y correo electrónico.
  • Diferencias de opinión: Es natural tener diferencias de opinión con los amigos, pero si estas diferencias se convierten en una fuente constante de conflicto, puede ser difícil mantener la amistad. En este caso, es importante aprender a comunicarse de manera efectiva y respetuosa y tratar de entender la perspectiva del otro.
  • Cambios en la vida: A medida que pasamos por diferentes etapas de la vida, nuestros intereses y prioridades pueden cambiar. Por ejemplo, si alguno tiene hijos y el otro no, puede ser difícil encontrar tiempo para pasar juntos. En estos casos, es importante ser comprensivo y estar dispuesto a adaptarse a los cambios.
  1. Mantener el contacto

La última clave que te damos para mantener la amistad a largo plazo es precisamente mantener el contacto regularmente. A medida que las responsabilidades de la vida adulta aumentan, a veces, es fácil perder el contacto con los amigos. Así que es importante que hagáis un esfuerzo consciente para mantenerse en contacto y programar tiempo para pasar juntos. ¡Es más fácil de lo que parece! Llama a tu amigo una vez a la semana, id hablando por whatsapp o programad alguna actividad juntos cada mes.

Mantener una amistad a largo plazo

¿Amigos para siempre?

A veces, aunque nos cueste aceptarlo, las amistades llegan a su fin. Puede ser que los intereses cambien, que las vidas tomen diferentes caminos o que simplemente, ya no haya la misma conexión que antes. Aunque puede ser difícil aceptarlo, es algo normal en la vida. A medida que cambiamos y crecemos, es posible que nuestros intereses y prioridades también cambien. Algunas amistades pueden desvanecerse gradualmente a medida que nos alejamos de ciertas personas o dejamos de compartir los mismos intereses. Otras veces, una amistad puede terminar abruptamente debido a una pelea o a un malentendido.

Aunque en ocasiones es difícil aceptar que una amistad ha llegado a su fin, es importante recordar que es una parte natural de la vida. A veces, las personas simplemente nos se alejamos y ya no tenemos nada en común. Otras veces, hay conflictos irreconciliables que hacen que sea imposible mantener la amistad.

Si estás experimentando el fin de una amistad, permitirte sentir tus emociones y procesar tus sentimientos. Es normal sentir tristeza, enfado o decepción cuando una amistad termina, pero recuerda que estas emociones también pasarán. Es comprensible que te sientas triste si una amistad termina, especialmente si ha sido una relación duradera. Pero, no te aferres a una amistad que ya no te está haciendo bien. A veces, es mejor dejar ir a alguien para permitir el crecimiento y el cambio personal.

Es tan importante valorar y mantener nuestras amistades, como recordar que no todas las relaciones son para siempre. Algunas amistades solo nos acompañaran durante una etapa de nuestra vida y eso está bien. Valora los momentos que habéis compartido y aprende de cada experiencia vivida.

Además, ten en cuenta que el final de una amistad no significa que haya algo «mal» contigo o con tu amigo. A veces, simplemente no podemos mantener una amistad por razones fuera de nuestro control. Lo más importante es tratar de aceptar el final de la amistad con dignidad. Si es posible, trata de hablar con tu amigo sobre cómo te sientes y lo que sientes que salió mal. Si no es posible, trata de dejar ir tus sentimientos negativos y seguir adelante.

Cada amistad es una oportunidad de aprendizaje y crecimiento personal. Su fin también puede abrirte nuevas oportunidades para conocer a otras personas y hacer amigos que compartan tus intereses y valores actuales.

¿He ha pasado esto con algún amigo o amiga? Si te apetece, puedes contarnos tu experiencia en nuestro instagram @arrecife.bienestar .

Si quieres aprender más sobre Relaciones interpersonales, puedes escuchar nuestro programa de radio, Serotonina.